Me cago en todos tus muertos!
y la tierra de los cementerios
se estremeció.
los edificios tambalearon,
el petroleo comenzó a manar
sin descanso.
las iglesias se llenaron
de viudas y fantasmas.
los suicidas se miraron
frente a un espejo.
los amantes conocieron aquello
de la petite morte.
las ruinas del pasado
obnubilaron por un instante
las promesas de catástrofes.
es la historia
clamando respeto.
tenia razón carlitos marx
la tradición de todas las generaciones muertas
oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario