domingo, 29 de noviembre de 2009

El picor del chile


Tres años sin hablarnos.
Y solo me dijiste
-Hola ¿como estas?
Y el fanstasma
de los sueños y las pesadillas
hizo
plop
y se fue para siempre.
Ya no sos
el picor del chile.
Te vi fea
y con el culo caido.
No dije nada.
Solo un
-Bien, bien
y te di la espalda.
Y me aleje
de nuevo hacia el silencio.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

¿Sueñan las cucarachas con tortugas azules?

Agonía,
sombras,
negras
luces
sobre
la
cama
deshecha.
Hambre
sed
agonía.
¿Sueñan
las
cucarachas
con
tortugas
azules?

martes, 24 de noviembre de 2009

La elegancia del yonquie


A William Burroughs
La elegancia del yonkie
en un almuerzo desnudo.

En la punta
de una aguja
mil demonios
garabatean el mundo.

Una manzana
es la cabeza
agujereada
de la dama
(malditas lesbianas
de Fadela)

Los ahorcados
tienen orgasmos
los drogadictos
observan meses
el dedo de su pie.

El lenguaje es un virus
macho
hembra
puto.
Poéticamente condenados.

lunes, 23 de noviembre de 2009

El santo de la anarquía


El comisario Ramón Falcón
hombre de bien, de ley y de Dios
(donde hay bien hay ley y Dios)
ordeno con voz de trueno
y serpientes venenosas en los ojos
-Vamos a barrer la plaga anarquista
y un Primero de Mayo de 1909, tiño de sangre la ciudad de Buenos Aires.
(sangre roja como la de la bandera socialista,
Almas negras de aquellos espíritus ateos)
Falcón fue un héroe.
Las damas de sociedad le brindaban sonrisitas complacientes
(mientras sus bombachas ardían)
y el Estado lo elevo al rango de salvador
(se sintió reconfortado Falcón, salvador, como el señor Jesucristo).
Ramón Falcón sello su nombre en la historia:
es calle, monumento y hasta escuela de policía.
Todo por servir a Dios, la Patria y la propiedad.
El anarquista Simón Radowitzky,
ajusticio a Ramón Falcón.
En Recoleta donde las señoras de sociedad y
los señoritos de moño y galera
se pasean seguros por saberse cerca de Falcón
lo hizo volar por los aires
(las bombas de la vindicación son siempre sonoras,
Como los fuegos artificiales).
Simón Radowitzky termino con sus huesos
En el frío penal de Ushuaia
(donde hasta los pingüinos se congelan)
No tiene calle ni monumento que lo honre.
Radowitzky sello su nombre en la historia,
Es el vindicador de mayo,
el santo de la anarquía.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Angelitos culones de Buenos Aires


¡Linda moral!
¡Burgueses acorazados de grasa y de buenas costumbres!
(Adán Buenos Ayres. Leopoldo Marechal)

Los angelitos culones de Buenos Aires
se divierten de lo lindo
cuando los muchachos descamisados
del conurbano
asustan a los hombres pulcros de Capital.
Los angelitos culones de Buenos Aires,
borrachos como una cuba,
toman cerveza y fuman marihuana
en las tardes
meando sobre
las cabezas
de los asustadizos habitantes de Almagro
que toman té con masas
en Las Violetas.
Las damas y los señores
contemplan,
con sus ojos vacíos,
la lluvia,
mientras tragan miedo
paseando perros de raza
que ladran
a los angelitos culones y borrachos de Buenos Aires.
Entre los vómitos de las bailantas
y la basura acumulada en una esquina,
un poeta escribe
el poema frío
como helado de vainilla
como moneda de un peso reluciente
como dientes postizos
de dentista
como policía enamorado.
Los angelitos culones y borrachos de Buenos Aires
comen gusanitos azucarados
para sentir mariposas en el estomago
con el amor
y las resacas.
A los asustadizos habitante de Almagro
nunca un tigre
un cóndor
un lobo
les devorara las sienes
ni los ojos vacíos
inyectados por adrenalina.
Solo seguirán comprando cremas para las hemorroides
y los pasteles
y untaran las tostadas con dulces
por la mañana.
Sin agonía
sin tragedia
sin lucidez
sin lujuria
sin una pizca de dulzura.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Piden queso


En las
cocinas
los
hornos
cuecen
la carne
asada.
Delibera
la asamblea
ruidosa
de las
ratas
(Piden
queso
y les dan
hueso)
En la
mesada
gimen
unas
mujeres
sudadas
(Piden
queso
y les
dan
hueso)

jueves, 19 de noviembre de 2009

El culo de Dios


Hurgo en un agujero negro
del universo.
La cena de Dios
Es un ungüento
de mierda y
olor a pedos.
Un coro
de ángeles adolescentes
gimen,
sagradas obscenidades.
Cuando le doy por culo,
Dios,
es una marica
de pelo revuelto y
pene circuncindado.
Le regalo
besos de lengua,
con mordiscos
en la nuca.
Estoy gestando
la vía láctea
sidosa,
dentro del culo
rey
de todos
los culos.

Rosas rojas marchitas


Me sacudo
-como un elefante mojado-
los restos de un amor
tan viejo,
tan gastado,
que solo
queda el gusto
rancio
y el sabor
a queso
podrido,
de los besos
olvidados.
Rosas rojas
marchitas
en las ventanas
de la ciudad.
Es el recuerdo
efímero,
como una raya
de cocaína.

Dirá Balzac


Me desprendo de las ladillas
como un tesoro oculto.
Ella sorbe un poco
de mi sangre envenenada.
Pequeña perla preciosa,
dulce recuerdo del romance furtivo.

Dicen que va a granizar.
Pero enseguida recuerdo
que Clarín miente.

Los grandes ojos negros
de la mujer morena.
El gran bulto inquieto
del muchacho musculoso.
Todos los sentidos conspiran
contra la decencia.

Una catequista
asesinada por ladrones.
Perdida para el cristianismo,
paso adelante para el libre pensamiento.
El crimen no paga, dirán los jueces,
salvo cuando sustentan fortunas,
dirá Balzac.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Una chica Bukowski


Ella es una chica Bukowski.
El alcohol y la cocaína
la ponen guarra.
Le gusta el sexo
con perdedores.
La carrera de la vida aburre,
repite.
Ella es bella y las heridas del tiempo
surcan su rostro y
sus heridas.
Escribe maravillosos poemas pornográficos,
sobre penes y vaginas.
Un día asqueada
se entrego a una multitud de linyeras
para que se la cojieran.
Fue un espectáculo bizarro.
Ella es una chica Bukowski,
cada tanto se masturba,
pensando en orgasmos
que hagan de la derrota
una dulce compañera.

La política


“Si vivimos,
vivamos,
para caminar sobre la cabeza del rey”

(William Shakeaspeare)

La democracia nace
con la cabeza tronchada de Luis XVI
y declarando sagrado
el derecho a la insurrección.
El gobierno de la burguesía
con la cabeza tronchada de Robespierre
y declarando sagrado el derecho a la propiedad.
Hegel hablaba de Napoleón
como la “Razón a caballo”,
¿Por qué nadie habla de la guillotina
como la Razón ensangrentada?
La política amigos,
es la decisión
de saltar al vacío,
o mantenerse firme
al pie del patíbulo.

martes, 17 de noviembre de 2009

Llora el mono sidoso


La ciudad tiene torres inmensas
y gente pequeña.
Ladran los perros
a los faroles,
transitan las cucarachas
por las paredes blancas.
Los héroes no tienen cabida,
los proxenetas
lengüetean cuellos
en la oficina.
La noche vomita desesperanza,
las sabanas empapadas de sudor,
el sexo acompasado con bostezos.
Llora el mono sidoso,
bajo la luz de la TV
y un huevo duro
como alimento.

La vida frígida


El fin del mundo esta lejos
pero las ganas de morir
tan cerca
tan palpable
tan pegadas a mí.
Me persigue como una sombra.
En el bar
en el trabajo
en el sexo
en el mercado.
Me acaricia el cuello
mientras duermo,
puebla mis sueños
con las ruinas del pasado.
Puta madre.
Esto sucede por respetar reglas
y andar sobrio en los caminos.
Me voy a poner hasta el culo
de drogas y alcohol,
para saborear las tetas
de la vida frígida
en una noche de insomnio..

lunes, 16 de noviembre de 2009

Confesión

Sinceramente
decir
te amo
seria
mentirte.
Y adular
tu inteligencia
un acto reñido
con la verdad.
Sábelo.
Solo
me interesa
tu sexo
y retirarme
antes de que hables
nuevamente.
Llámalo
falta de compromiso,
superficialidad
o como quieras.
Yo prefiero pensar
que te ofrezco
la inmensidad
del tiempo
sin mi incomoda
presencia.

domingo, 15 de noviembre de 2009

La mujer del Paraguay


Fue la mujer
del Paraguay
la que me dijo:
-Ámame con pasión,
sino vete lejos.
Sorbía de sus senos
leche ajada
de los tiempos
y en las oscuras esquinas
del barrio de Flores,
entre tragos de vino y pan
proclamábamos la guerra
a Dios y a sus ángeles,
dando con la pija dura
al culo del mundo.
No eran tiempos de rosas,
ni tronaban los fusiles.
Una fría desolación
se posaba dueña
de las noches
y los días.
Los viejos manifiestos revolucionarios
ardían en las capillas
y los mausoleos de la academia.
Y nosotros,
tiburones hambrientos,
empecinados en ser breves y crueles,
orinando nuestro pis amarillento
en las alcantarillas sucias
de la ciudad que dormía.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Vincent y Theo


Los girasoles de Van Gogh brillaban como soles embriagados ¿Serian una alucinación producida por el hongo del centeno y el laudano? o quizás una interpretación de los algodones enchastrados de sangre después de cortarse la oreja? (Querido Vincent: las putas no quieren orejas, quieren dinero, escribió con razón el tío Hank luego del tercer vaso de whisky). Menos mal que fue la oreja y no por ejemplo un dedo o la mano, a ver si todavía ese fatal suceso nos hubiera privado de sus girasoles y sus cuartos y sus comedores de patatas. Y Theo ¿seria el mecenas generoso sabedor del talento de Vincent o un frío contador que calculaba en términos de pérdidas y ganancias? ¿Por qué la historia habla del genio demente y el hermano generoso? Theo da asco. Los Theos del mundo dan pena. Hombres grises que a lo sumo se prenden como garrapatas al lomo del talento y la fuerza ajena. Vincent agonizaba, Theo apenas percibía la vida a través de los ojos del geniecillo. Theo seguía la bucólica y segura vida del burgués, acumulaba. La oreja sangrante es mucho más que una ofrenda al amor, es un acto de desprecio y despojo (las novias no quieren actos pasionales, quieren sentirse seguras, me dijo una novia al abandonarme por un Theo). La seguridad es el concepto de policía de la sociedad burguesa, es el orden, la inmutabilidad de los porotos y la propiedad las patatas. Preferible ahogarse en pedos que surfear enloquecidos en el ojo del huracán o emborracharse hasta la inconciencia junto a Gauguin en los burdeles de la France. Gracias Vincent por tu oreja, les diste de que hablar.

Ladrillo y cemento

El bello albañil,
me acorrala
contra el muro.
Ladrillo y
cemento
fresco.
Aúllo:
-Dame más.
Acabe.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Tristes poetas


Arthur Rimbaud escandalizaba en la París roja de la Comuna
a los poetas de la rima y de la métrica.
Llamaba a cambiar la vida.
John Reed correteaba a Pancho Villa por el México insurgente
y se conmovía en diez días ante la revolución de los soviets.
Maikovski erizaba la piel de la revolución, reclamando el derecho al pan y a la poesía.
Andre Breton proclamaba la unidad entre arte y revolución,
definiedo al surrealismo como el comunismo del genio.
Miguel Hernandez se pudría en Carabanchel.
Roque Daltón huía de los paredones de fusilamiento de los militares
para ser fusilado por sus camaradas.
Paco Urondo caía en manos de los grupos de tareas,
bajo el sol brillante de Mendoza.
Hasta el stalinista Neruda marchaba cada tanto de exilio en exilio.
Bertold Brecht se quejaba de poder con los elefantes y
sucumbir ante los piojos.
Cuerpo y palabra en una misma dirección.
Tristes son los poetas y escritores adoradores del amor y respetuosos de las leyes.
Inconmovibles frente a la vida.
Rendidos frente a lo existente.
Temerosos de incendiar el mundo y sentirlo crujir bajo sus pies.

sábado, 7 de noviembre de 2009

La utilidad de un traidor (ante la muerte del traidor José Rodriguez)


El traidor murio

en su cama.

¿Alguien lo habra llorado?

Seguramente una misa

oficiara de previa

antes de ingresar

al reino de Dios,

allí donde aspiran a estar

todos los canallas.

¿Habra tenido la muerte

de Artemino Cruz

y los fantasmas

de los compañeros

entregados

lo habran perseguido?

Maldito mil veces maldito.

Algo habran hecho,

repetian las señoras gordas

y los contadores

el discurso dictado

por la lengua del terror.

Si, algo hicieron.

Combatieron,

por el derecho a vivir

los lunes al sol.

El presente

se erige sobre los huesos

de esta derrota.

¿Cual es la utilidad de un traidor?

Ofrecer sus tripas

para colgar a un burgués.

Maldito mil veces maldito.

Esta vez no pudo ser.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Un estupido poema


El amor
es:
el mandato
de una
religión
de pedófilos;
una
mujer
gorda
cargada
de odio;
un estúpido
poema.
Y tú
ausencia
eterna
en una
noche
de cocaína.

Patibulo


Al pie
del patíbulo
miro
por última vez
los ojos
de sus verdugos.
Eran fríos
a pesar
del odio.
Pensó:
La derrota
es implacable
y la traición
es vomitiva.
Se abrió
el foso
y el cuerpo
quedo colgando
con el pene
parado
por el
rigor mortis.
La multitud
gozo
el instante
como
un orgasmo
colectivo.
Eso fue
todo.
Se retiraron
vitoreando
la mano
del verdugo.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Patria y muerte



(Patria parida
sobre el vientre
inmaculado de la Virgen
del Rosario
en nuestros ovarios).
La furia de los Gloster
rego la Plaza de Mayo
de cadaveres.
Las fuentes que refrescaron
las patas proletarias
en 1945,
se tiñeron de roja sangre
en 1955.
Que el hijo
del albañil,
muera albañil
y la sirvienta
sea barata,
proclamaban euforicos
los vencedores
de sangre azul