El gato rengo

1
Un sueño. Una mujer joven, a la que no logro identificar, pasa la palma de su mano por la frente empapada. Llueve torrencialmente.
Hay una mueca de soledad y angustia en su rostro.

2
Fue Stalin –brutal expresión de la fría crueldad del burócrata- quien dijo que un muerto constituía una tragedia, mientras que millones eran una estadística.

3
La tragedia genera el dolor más profundo. Pero también arrastra al presente la memoria y pone en evidencia la hipocresía. Siempre el calculo. La tragedia que viene a ser cubierta por la estadística, la de las victimas de los que ejercen el mal sin pasión, la llamamos historia.

4
La canción del Quijote: “Hazme lugar caballero en tu montura, pues yo también voy cargado de amargura. Hazme lugar caballero en tu montura pues voy cargado de amargura y no puedo batallar”

5
El dolor seduce. Exhala sensuales perfumes, afrodisíacos recuerdos. Nos pide entrega absoluta. Amante exigente hambriento de tus nervios. Anuda mi estomago con sus finos dedos.

6
Con su rodete Eva Perón, soñó la justicia. Nunca la obtuvo.
Jugo su suerte al punto y banca, sin saber si gano o perdió.
Desde entonces fumaba cigarrillos largo esperando un nuevo día.

7
La medicina es el reino tiránico de los asnos y los truhanes. La enfermedad es la excusa para instaurar un régimen de excepción sobre los cuerpos. Lucran con la administración de la muerte.

8
La mujer joven bajo la lluvia grita. Su rostro, a pesar de todo, es dulce. Viste unos jeans, polera blanca, chaleco. Grita y nadie la escucha.

9
Sacuden la noche, los maullidos tristes del gato rengo.

10
Recuerda no tener miedo.

11
Beber, beber, beber. Por los vencidos, por la alegría, por la historia.